PYMES: LO QUE IMPORTA NO ES DONDE ESTÁN SINO EN QUE DIRECCIÓN SE MUEVEN.

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             La fase post pandemia prepara lo mejor para el país en materia económica. Mas de U$S 50.000 millones en perdidas, coloca al  sector privado disminuido y vulnerable en terapia intensiva. Para fines de Abril, Apyme señalaba que aproximadamente 17.700 pymes habían cerrado sus puertas [1] .

            La depuración inducida por la cuarentena y la recesión económica dejara a los privados expuestos al colapso. ¿Sera lo que se busca ? ¿Un sector privado desahuciado y un sector publico fuerte, del cual todos dependan? Todo un camino abierto hacia la meta de inactividad industrial y su efecto de pobreza inducida.

                  Los ministerios de agricultura y relaciones exteriores deberían dimensionar los efectos de la crisis sanitaria global, para pensar en una reactivacion sustentable de la Argentina con un modelo agroexportador relevante, pero lejos de eso, se muestran interesados en una victoria pirrica como lo es la intervención  y posible expropiación  de Vicentin S.A.[2] para solucionar los inconvenientes de la mentada "soberanía alimentaria." o desatender los ataques a las mas de 30  silobolsas en distintas provincias del país, cuyas perdidas están por estimarse. 

Diario La Nación, roturas de silobolsas en Chivilcoy

            Pero el sector agrícola no es el único bajo fuego y cercado por estos días, el hotelero acuso el golpe de la cuarentena. Conforme la Federación que los agrupa, la caída interanual fue del 83% en Abril y Mayo ¿Serán objeto de intervención los hoteles que se concursen con fundamento en una soberanía hotelera para promover el turismo? Nada se sabe, ignorada la división de poderes, cualquier medio justifica el fin.

          Los pronósticos de evolución del PBI en Argentina para el cierre de año son bastantes pesimistas. Conforme los estudios realizados por FIEL caerá a niveles de la primera guerra mundial, un retroceso histórico [3]. Lo que se agravaría por decisiones de política económica perimidas en el tiempo y sin rumbo que despeje dudas y favorezca la confianza.

Fuente: infobae económico

              ¿Se conoce algún plan para la fase post  pandemia? Nada lo indica, por el contrario la improvisación se vera acentuada ante una situación desesperante donde la soberbia idiologica  primará por sobre la desaceleracion de la actividad productiva y medidas para contenerla. 

                  Pareciera que ciertas autoridades intentan apostar  a cuantos comercios les alcanzara el cierre o la quiebra, con o sin protocolo sanitario. Por ahora según estadísticas de la Cámara Argentina de Comercio cerraron definitivamente hasta mediados del mes de junio, cerca de 40.000 negocios. Veremos en las próximas semanas como siguen las mediciones[4] aunque ciertos pronósticos señalan que recién para el año 2022 podría hablarse de un recupero de actividad a los niveles pre pandemia. 

¿Cuales son algunas de las trampas que las pymes enfrentan en este contexto de riesgo ?

•                   La primera de las dificultades con las que suelen encontrarse las empresas es la ingenuidad, que puede emboscar a cualquier empresa, independientemente de su destreza, formación o trayectoria. La empresa ingenua tiende a simplificar  la situación perdiendo de vista factores como: costos, recesión o hiperinflacion que pueden afectar no solo resultados sino  su existencia. 

                       

•                   Las decisiones importantes  no son simples. El exceso de confianza puede llevar a encerrarse ante las posibles alternativas  y es un factor importante a considerar en contextos de riesgo.  Se deben revisar viejas formas de desarrollo gerencial y resulta indispensable una comunicación abierta con todo el equipo de trabajo para percibir las vulnerabilidades a corregir.

                                  

•                   La suposición es otra trampa que en tiempos de incertidumbre puede llevar al colapso del negocio o empresa. Un gobierno sin recursos ni planes, puede amenazar toda la economía con alto impacto sobre el sector privado con medidas como la intervención o cambios bruscos en la política cambiaria sin medir consecuencias. La intuición en los negocios puede generar mayores costos que un oportuno asesoramiento. 

 

•                 Precipitarse en la toma de decisiones puede aumentar la vulnerabilidad. Hay que activar el nivel de diligencia que favorezca la mejor decisión  no exenta de riesgos. La estrechez de miras o la falta de análisis del contexto de manera adecuada, puede llevar a resultados nocivos para la empresa. 

•             La inestabilidad económica no significa que todos los días se tenga que tomar decisiones. Las crisis son un naufragio  pero  no necesariamente significa que todo se hunde, hay que sobrevivir, sabiendo que elija lo que se elija se incurre  en riesgos.

                          

•          En tiempos de crisis los errores de decisión tienen un costo extra porque las posibilidades de recupero son mas lentas. Son épocas de incubación de desajustes que requieren previsibilidad en las decisiones. La arrogancia extrema es enemiga de la previsión: importante es saber distinguir entre una oportunidad para aprovechar y una tentación para resistir. 

•          Las prioridades equivocadas producto de una deficiente lectura del entorno,  pueden causar trastornos irreversibles. Las empresas deben revaluar los objetivos y decidir su cumplimiento analizando todas las variables posibles para una ordenada reestructuracion, inclusive  utilizando distintas herramientas:

1.   Societarias. Como son  la fusión o contratos de colaboración empresaria, entre otras.
2.  Administrativas.  Mediante el acuerdo preventivo de crisis, vía ley Nº 24013 ante la autoridad laboral  competente.
3.  Judiciales. a través de la legislación de crisis. Entre las herramientas de reestructuracion se encuentran: el acuerdo preventivo extrajudicial (APE) o el concurso preventivo ambas reguladas bajo la ley  de Concursos y Quiebras.  

              Como decia Oliver Wendell Holmes, lo mas importante de este mundo no es tanto donde estamos, sino en que dirección nos estamos moviendo y lo dicho es valido tanto para las personas como para las empresas. Aquellas que no tienen convicción de lo que hacen y a donde se dirigen se diluyen en la crisis y finalmente desaparecen. 

                          

                                  

                                  

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[1]  Sergio Serrichio "100 días de cuarentena: un balance económico con abundantes perdidas y muchas dudas sobre lo que viene" en www.infobae.com del 27/6/2020 sección económica.

[2] Ver en este blog "Proceso concursal e intervención estatal: caso Vicentin S.A." del 25/6/20.

[3] Mendoza post "Aseguran que el PBI argentino caerá a niveles de la Primera guerra mundial" del 28/6/20

[4]  "Preocupante: 40.000 comercios cerraron definitivamente en el país, durante la cuarentena" www.ambito.com 29/6/20