Con la segunda ola de coronavirus en desarrollo, la actividad industrial y comercial en buena parte del mundo no podrá reactivarse en toda su capacidad y muchos sectores seguirán registrando perdidas durante el año 2021, mas allá del efecto dilatado que pueda producir la vacuna en ciernes. Por citar un ejemplo, casi cuarenta empresas del sector aerocomercial global se encuentran en dificultades muy grandes o bajo procedimientos de quiebra (1).
Pretender alianzas, fusiones o reorganizaciones inmediatas, como salida a la crisis de este segmento del transporte u otros conexos al turismo, no será probable ante las diferentes restricciones impuestas por los países en medidas sanitarias. Al momento de escribir el presente articulo en la Ciudad de Buzios se dispuso un plazo de 72hrs. para que los turistas la abandonen por orden de la justicia del Estado de Rio de Janeiro y así proceder a cerrar todas las actividades no esenciales ante la situación de crisis sanitaria. Reina la incertidumbre.
Los gobiernos deben hacer frente de manera planificada al desafió de la actividad comercial ante la crisis sanitaria, evitando improvisar y continuando con la asistencia fiscal al sector privado de manera segmentada. La reactivación en un contexto de marcada incertidumbre no será de todos los agentes económicos por igual, se requiere asignar recursos de manera consciente y atendiendo prioridades. La mayor amenaza es la falta en la claridad de propósitos y la ausencia de acciones coordinadas entre autoridades y cámaras empresariales que provoquen múltiples decisiones apresuradas y sin preparación alguna.
Es impostergable el proceso de desajuste. Por cuanto es muy probable que disminuyan los actores en varios mercados, sometidos a fuertes restricciones de diversa naturaleza, los cuales se someterán voluntaria o involuntariamente al proceso de reestructuración o liquidación para capear la crisis. El pasado 3 de diciembre la justicia comercial de Argentina decreto la quiebra de Gestión y Turismo SA, razón social de la agencia de turismo mayorista "Solways", resultando de ello mas de 60 empresas de turismo afectadas y compromisos pendientes que superan los U$S 500.000.(2)
Las legislaciones de quiebras deberán sujetarse a una fuerte y constante revisión por parte de las autoridades y operadores jurídicos, para responder a las exigencias del impacto de la pandemia en la economía, bajo riesgo de ser inaplicables o insuficientes para solucionar los problemas de las empresas en cesación de pagos o con dificultades económicas generales. Los legisladores deberán estar a la altura de las circunstancias.
Fuente: https://es.statista.com/grafico/23672/variacion-interanual-del-pib-real-en-paises-seleccionados-en-2020/ |
Se atraviesan tiempos donde las fuerzas del comercio y la interconexión tecnológica global hacen posible la quiebra en eslabones o cadenas, que obligaran a muchas empresas a solicitar su concurso o quiebra por el efecto "tracción" de la insolvencia de otras del sector, que de alguna manera no han podido sobrellevar los efectos de la situación provocada por el Covid-19, los que se agravan por la marcada imprudencia de ciertas políticas publicas.
La tragedia diaria de miles de negocios cerrando de manera definitiva sus persianas tras mas de nueve meses de cuarentena, no podrá solucionarse con las distintas vacunas que los laboratorios desarrollan por estos días. La asfixia económica no logra dar con el oxigeno adecuado y oportuno que permita a las unidades productivas mantenerse ante el contexto de recesión prolongada (3).
De manera sorprendente algunos países demoran nuevos paquetes de asistencia, lo que provoca mayor presión en la economía ante los marcados ascensos de desempleo, como sucede en EE.UU (4). Se deben generar expectativas positivas y no negativas, para inyectar confianza en el mercado de trabajo que facilite la reactivacion. Por el contrario, gobiernos como el de Argentina deciden aumentar la presión fiscal -como sucede con el reciente creado "impuesto a la riqueza"- que en vez de generar mayor certidumbre, produce todo lo contrario.
El dato del desempleo mencionado, no es insignificante y refleja entre otras variables el alto nivel de despidos en paralelo con un fuerte avance de los efectos económicos adversos de la crisis en salud. Por ello cuanto mas se prolongue la crisis y las medidas de estimulo necesarias para una reactivacion económica, mayor será la recesión y el riesgo de quiebras en amplios sectores financieros y de la industria.
Fuente: https://es.statista.com/grafico/23213/busquedas-sobre-desempleo-en-google-en-latinoamerica/ |
El sector bancario también se vera afectado por la situación y no esta indemne al contexto. La calificadora de riesgo Fitch Ratings, advierte notas negativas para este rubro en Latinoamerica, en lo que ha proyecciones del año 2021 se refiere, el que estará marcado por un transito delicado en la situación sanitaria. Frente a la débil recuperación económica se profundiza una marcada baja en la calidad de activos y una disminución de la rentabilidad del sector (5).
El banco de España por su parte, prevé un aumento significativo de las quiebras a partir del 31.12.20 tras la finalización de la moratoria dispuesta por el gobierno, que eximia a las empresas de la obligación de presentarse en concurso preventivo. Ello se suma a la baja eficiencia de los procedimientos de insolvencia regulados, que no resultan atractivos para autónomos y pequeñas empresas(6), retardando la reestructuracion del patrimonio y las ventajas que ello conllevan en una economía en recesión.
El desafío de la flexibilidad legislativa para facilitar la reactivación económica de los próximos meses será considerable. Desde leyes sobre financiamiento hasta las que faciliten fusiones o reestructuraciones y liquidaciones de empresas, serán necesarias para un reacomodamiento económico que no será inmediato. No se trata de elegir entre salud o economía, sino que ambas variables exigirán de los gobiernos acciones coordinadas con el sector privado para reactivar el tejido productivo y sostener la salud de la población. Sin reglas no hay mercado que prospere.
La recesión difiere en cada país por sus niveles de profundidad. Cuanto mayor sea su impacto mas demora tendrá la economía en refuncionalizar variables que permitan una reactivacion industrial y comercial con vigor. Si las políticas publicas no acompañan esta transición generando condiciones de crecimiento, el efecto será todo lo contrario al deseado: caída de la actividad con mayor números de quiebras y aumento de desempleo, lo que retroalimenta la crisis. En Noviembre de 2020 la OCDE vaticino un derrumbe del 12,9% en 2020 para Argentina, superior al de España y el Reino Unido. México caerá 9,2% y Brasil un 6%.(7)
Fuente: https://es.statista.com/grafico/23189/variacion-del-pib-real-en-paises-seleccionados-en-2020-y-2021/ |
Muchos especialistas sostienen que hay que dinamizar el proceso de industrialización para que genere expectativas de cambio. Para ello las políticas domesticas deben ser coherentes, de manera que puedan responder y contrarrestar los efectos negativos de la recesión. Toda contracción económica tiene un elevado costo social que se profundiza cuanto mayor sea la duración de aquella.
Los gobiernos deben comprender que a mayor desequilibrio macroeconómico mas lenta será la recuperación, mas grande la tensión de los actores económicos y mas extensa la crisis, por lo que las estrategias fiscales y comerciales deben ser la punta de lanza que genere credibilidad y confianza para emerger de una situación que luce compleja. Sin el sector privado como motor de crecimiento se prolongara la crisis, mayor será el ciclo recesivo y el terreno propicio para el riesgo de quiebras en cadena con sus efectos negativos sobre el tejido productivo y el animo de la sociedad.
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(7) https://elpais.com/economia/2020-12-01/la-recesion-en-argentina-sera-record-entre-los-paises-del-g20.html; https://www.eluniversal.com.co/opinion/columna/cuidado-de-no-innovar-a-tiempo-HL3863977
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